machi
Voz mapuche.
1. m. y f. Chile. En la cultura mapuche, curandero de oficio, especialmente cuando es mujer.(RAE)
Un machi es un chamán en la cultura tradicional del pueblo mapuche, un pueblo indígena de Chile y suroeste de Argentina. Su principal rol es la curación de dolencias, tanto los males físicos como los que se consideran derivados de la acción de fuerzas espirituales o a transgresiones de normas.
| Carla Nicol Vargas Berrios |
La machi ejercía y ejerce aún funciones muy distintas a las de la meica o curandera. En primer lugar, deben comprenderse sus técnicas curativas y sus rituales dentro de una cosmovisión y cultura específica, la mapuche. En ella se resume buena parte de la cultura religiosa mapuche. La machi ejerce su oficio por un llamado especial del Dios mapuche (Chau o Ngenechen), al que accede mediante una ceremonia de iniciación que renueva periódicamente. Para sanar a la persona enferma, la machi debe realizar una ceremonia de sanación llamada machitún o nguillatún que consiste en sacar el mal del cuerpo (puede ser un espíritu o un mal que introdujo un brujo) a través de ritos auxiliares como cantos y rezos realizados con instrumentos mágicos como el kultrun o las ramas de canelo. Durante este proceso, la machi cae en trance y es capaz de adivinar el mal que aqueja al enfermo y prescribir sus recomendaciones curativas con conjuros purificadores. Estos procedimientos han sido narrados por investigadores de la cultura mapuche, así como por niños y adultos que crecieron junto a estas tradiciones.
| Carla Nicol Vargas Berrios |
El nombre Machi es usado para designar a la persona que tiene la función de autoridad religiosa, consejera y protectora del pueblo Mapuche. Debido a que actualmente en mucho menor la proporción de hombres que cumplen la función de Machi, normalmente se describe al Machi como una mujer mapuche.
La vida como machi en el pueblo mapuche
Puede ser machi una mujer o un hombre. Dirige los ceremoniales de curación, llamados machitún. En el caso de que las autoridades tradicionales, como el ngenpin, no se encarguen del guillatún, ceremonia mediante la cual la comunidad se comunica con el mundo espiritual, también esta función puede ser ejercida por un machi. Dado que es el oráculo de su comunidad, el machi actúa como consejero del lonco.
Elección
Para llegar a ser machi usualmente se deben producir ciertos sucesos durante la infancia. Por ejemplo:
Sueños premonitorios. Revelaciones sobrenaturales. Influencia de la familia. Transmisión hereditaria. Poder de curación de enfermedades. Iniciativa propia.
El linaje (küpal) de una familia puede tener antecedentes de la existencia de machis anteriores y esto se conoce como machi küpal. Pero personas ajenas a estos linajes también pueden manifestar las condiciones para ejercer esta actividad. La persona elegida se prepara durante un tiempo, para posteriormente irse a vivir un tiempo con un machi consagrado, que le entregará las herramientas para desempeñarse como tal. Posteriormente el nuevo machi será consagrado en la ceremonia del machiluwün.
Rol Plano medicinal
El machi es la figura central de la medicina mapuche, poseedor de gran sabiduría y poder curativo. Conoce el uso medicinal de ciertas planta y sustancias, a fin de usar las requeridas para obtener el remedio (ḻaweṉ) adecuado. Tiene también el poder de los espíritus y los sueños (pewma), que son de gran importancia, puesto que su interpretación determina muchas decisiones importantes.
Plano espiritual
El/la machi es la persona que maneja y resuelve las preocupaciones de la sociedad mapuche con respecto a las fuerzas malignas y dañinas del mundo. Se considera que puede controlar el clima, predecir el futuro y descubrir las cosas ocultas. Ya que su función cotidiana básica es la de curar, un machi también tiene los conocimientos necesarios para descubrir al calcu (kalku, "brujo") o a cualquier individuo que, mediante poderes o ayuda sobrenaturales, quiera dañar o matar a otra persona.
Actitud
| En el Monumento a la Araucanía, la figura sobre el pedestal es una machi. |
Todo(a) machi debe seguir el camino indicado en el Admapu y no dejarse llevar por el mal o por las malas actitudes. Si no cumple estos preceptos, estará siguiendo un camino equivocado que lo conducirá a ser considerado kalku, persona que practica el mal por medios místicos o espirituales).
El cultrún
(en mapudungún: kultrung) es un instrumento de percusión, membranófono y de golpe directo usado por el pueblo mapuche.
| Imagen del Meli Witran Mapu pintado generalmente sobre el cultrún. |
Descripción
Es un membranófono, con membrana atada, de golpe directo, semiesférico (como el timbal), independiente. Mide aproximadamente entre 35 y 40 cm de diámetro superior y una altura de 12 a 15 cm. Su cuerpo es de madera de canelo, laurel, lenga o lingue, cortada en invierno para que no se parta. Se construye ahuecando un tronco hasta darle a la caja de resonancia la forma de un cono abierto o cóncavo, con forma de fuentón. Posteriormente, se le adhiere un parche de cuero de cordero o caballo cubriendo la boca, tensado con ataduras de cuero abrazando el cuerpo del tambor.
Usos
El cultrún es un tambor ceremonial y el instrumento musical más importante de la cultura mapuche, utilizado principalmente por los machis (figura médica tradicional) para los rituales religiosos y culturales, así como durante la rogativa del Ngillatun, ceremonia típica mapuche. Se ejecuta de dos maneras: sostenido en la mano y percutido con una baqueta o apoyado en el suelo y percutido con dos baquetas. En la cosmovisión mapuche, el cultrún representa la mitad del universo o del mundo en su forma semiesférica; en el parche se encuentran representados los cuatro puntos cardinales, que son los poderes omnipotentes de Ngünechen, dominador de las personas, los cuales están representados por dos líneas a manera de cruz y sus extremos se ramifican en tres líneas más, representando las patas del choyke (ñandú); dentro de los cuartos que quedan divididos por las líneas anteriormente descritas, se dibujan las cuatro estaciones del año.
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Carla Nicol Vargas Berrios |
La cosmovisión mapuche representa a la región celeste "wenu mapu", poblada de dioses. El machi o fileu es el intermediario entre le pueblo mapuche y el wenu mapu y su mediación a las divinidades otorgan salud, bienestar, tranquilidad y abundancia al pueblo mapuche.
En el campo de batalla entre el bien y el mal sobre la tierra, el machi tiene la representación divina. Es así cómo está dotado de facultades adivinatorias, terapéuticas y rituales.
Kemu-Kemu
Los Kemu-Kemu son protectores de la naturaleza y elemento fundamental en el rewe.
En la época prehispánica, los machis eran sólo varones, en la actualidad por influencia europea y cristiana esta función paso a ser ejercida mayoritariamente por mujeres.
Una serie de señales premonitorias y sueños, más la aparición de una enfermedad incurable indican a un mapuche su elección para desempeñarse como chamán, con lo cual al consagrarse, consigue curar su enfermedad. Un machi de experiencia lo toma en aprendizaje por varios años hasta su consagración con la presencia de consagrados chamanes en su iniciación, machi luwun, cantarán al anciano rey, la anciana reina, a caciques y guerreros, y a todas las deidades.
El nuevo machi se preocupa de preparar el rewe o altar, donde se destaca el kemu-kemu, escalera ritual antropomorfa de cuatro a siete peldaños, símbolo de su estado y que representa su poder de comunicación con los dioses del wenu mapu. Lo mismo hace con el kultrún, al son del cuál cantará toda su vida invocando a los dioses y antepasados en beneficio de su pueblo.
Algunos machis poseen la facultad de interpretar por medio de las orinas de un paciente, los males que lo aquejan, con sorprendente exactitud.
Todos sus remedios son en base a productos generados por la naturaleza, lo que los obliga a un conocimiento importante de las propiedades de las plantas, y siempre va acompañado de las invocaciones a sus dioses, la parte más importante de su labor.
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Carla Nicol Vargas Berrios |
El Calcu
El Kalku o Calcu, es un brujo que trabaja con los wekufes "espíritus malignos" como Guirivilo, Anchimallén o Chonchon, manifestación mágica de sus poderes.
A veces heredan su papel, otras son machi interesadas en lucrar, o frustrados que hacen caso omiso de las leyes del admapu (normas mapuches).
Utiliza poderes espirituales para hacer daño, los trabajos de hechicería se denominan kalkutun, son proyecciones de sus fuerzas, a veces a través de piedritas, animales diminutos o insectos, que introduce en la persona animal o planta que se ha de embrujar.
Merodean los cementerios para apoderarse del pillú (ánima del muerto reciente que se resiste a alejarse de su cuerpo), que luego utilizará para hacer daño a otras personas. Para evitarlo los mapuches realizan el ritual funerario llamado Aun.
El calcu tomado como "mal", es una fuerza desintegradora que utilizan estos brujos para provocar enfermedades y muerte. Proviene de los wekufe y es alimentada por la envidia y otros sentimientos dañinos del hombre.
La Machi deberá combinar diversos ritos para arrancar estos males, también provee de amuletos para prevenirlos.
Debido a la naturaleza espiritual del Machi y el Calcu, los españoles tardaron en entender las diferencias entre ellos.
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Carla Nicol Vargas Berrios |
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Carla Nicol Vargas Berrios |
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Carla Nicol Vargas Berrios |
La machi ejercía y ejerce aún funciones muy distintas a las de la meica o curandera. En primer lugar, deben comprenderse sus técnicas curativas y sus rituales dentro de una cosmovisión y cultura específica, la mapuche. En ella se resume buena parte de la cultura religiosa mapuche.
La machi ejerce su oficio por un llamado especial del Dios mapuche (Chau o Ngenechen), al que accede mediante una ceremonia de iniciación que renueva periódicamente. Para sanar a la persona enferma, la machi debe realizar una ceremonia de sanación llamada machitún o nguillatún que consiste en sacar el mal del cuerpo (puede ser un espíritu o un mal que introdujo un brujo) a través de ritos auxiliares como cantos y rezos realizados con instrumentos mágicos como el kultrun o las ramas de canelo. Durante este proceso, la machi cae en trance y es capaz de adivinar el mal que aqueja al enfermo y prescribir sus recomendaciones curativas con conjuros purificadores.
Estos procedimientos han sido narrados por investigadores de la cultura mapuche, así como por niños y adultos que crecieron junto a estas tradiciones.
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Carla Nicol Vargas Berrios |
¿Cómo se elige un machi mapuche?
La machi ejerce su oficio por un llamado especial del Dios mapuche (Chau o Ngenechen), al que accede mediante una ceremonia de iniciación que renueva periódicamente.