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El teatro.
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sábado, 6 de marzo de 2021

Peter Stephen Paul Brook.-a

(Londres, 21 de marzo de 1925-París, 2 de julio de 2022)​ fue un director de teatro, cine y ópera británico que vivió en Francia desde principios de los años 1970. Fue uno de los directores más influyentes del teatro contemporáneo​ con puestas en escena revolucionarias e innovadoras. Fue galardonado con múltiples premios: Tony, Emmy, Laurence Oliver, Praemium Imperiale, Prix Italia​ y el Premio Princesa de Asturias de las Artes 2019.

Biografía

Nació en el barrio de Chiswick de la ciudad de Londres, hijo de judíos rusos emigrados al Reino Unido,

Su padre, Simon Brook, era un joven judío lituano, estudiante de Letras que también cursó ingeniería eléctrica, combatiendo en el ardor de la juventud contra el zarismo en las filas de los mencheviques. Fueron años de mucha turbulencia en el imperio ruso lo que luego acabaría en revolución y la constitución de la URSS. Simon Brook llegó a estar encarcelado por sus actividades políticas. Luego contrajo matrimonio con Ida Jansen, una doctora en ciencias, ambos viajaron a Londres al estallar la Gran Guerra con una sola libra en el bolsillo. La familia reorientó sus negocios hacia la industria farmacéutica, creando los Westminster Laboratories, lo que les reportó una buena posición económica. 

Cursó estudios de primaria, primero en el prestigiosos colegio St. George, después en la Westminster School, en la Escuela Gresham (1939), así como en la Universidad de Oxford.5​ Se inclinó muy pronto por el teatro. Hizo su debut como director en 1945, con apenas veinte años, en Birmingham Rep, después de ser descubierto por Barry Jackson. Estuvo casado con la actriz Natasha Parry, con quien tuvo dos hijos, el director Simon Brook y la actriz Irina Brook.

Trayectoria teatral

Sus primeros montajes teatrales fueron aceptados por el público. Entre 1947 y 1950 fue director de la Royal Opera House. Durante los cincuenta, trabajó en muchas producciones en Europa y Estados Unidos y en 1962 regresó a Stratford-upon-Avon para unirse a la recién establecida Royal Shakespeare Company (RSC). Durante los sesenta, dirigió una gran cantidad de producciones para esta compañía. En 1968 participó en el taller teatral de Jean-Louis Barrault. Eso le permitió, por primera vez, trabajar con actores de culturas diferentes a la suya, lo cual le impacto mucho. Jean-Louis Barrault lo invitó a formar parte del Teatro de las Naciones en París. Brook consideraba que el teatro es útil y necesario.

Traslado a París

En 1970 dio un giro radical en su vida y se mudó a París.  Pensó que en el teatro, la investigación debía ser puesta a prueba constantemente en la representación y en la actuación. Sostuvo que el teatro debía poner a prueba la representación constantemente para revitalizarse todo el tiempo que quiera y necesite y en las condiciones que quiera y exija. Esto era algo que una compañía profesional no podía afrontar. Por eso, con Micheline Rozan decidió apartarse de la idea de compañía teatral para explorar el teatro a través de una nueva estructura. Para describir lo que pretendían, les pareció apropiado el término «centro».

Obtuvieron fondos de fundaciones internacionales, de la Fundación Ford y la Fundación Anderson de Estados Unidos, de la Fundación Gulbenkian de Europa y el Festival Shiraz de Irán. El espacio físico lo cedió el gobierno francés. Los actores y actrices provenían de todas partes del mundo. Con una serie de actividades superpuestas fundaron primero un centro de investigación y luego un centro de creación. Con este centro internacional, en el cual convergían las más diversas culturas, emprendió largas giras a países lejanos incluyendo India y Afganistán.

«A mí me parece que el hecho de fundar un grupo internacional nos da la oportunidad de descubrir de un modo enteramente novedoso la fuerza de las diferencias entre la gente y lo saludable que dichas diferencias son.»

En 1972 se fueron de gira por África con unas treinta personas. Estuvieron viajando durante tres meses realizando representaciones en diferentes poblados en Argelia, Nigeria, y lugares donde nunca habían visto un actor ambulante recorriendo el Sahara con un equipo de fotógrafos y filmadores.

Viajó con pequeños grupos, se interesó por la expresión teatral asiática, y luego atravesó África de lado a lado: un reflejo temprano está en su pieza Los ik, de 1975.

Este teatro experimental realizó improvisaciones. Viajaron por África, América y Francia actuando en poblados aislados en le medio del desierto o en poblados con mucha gente, para minorías raciales, niños y ancianos y personas con diversidad funcional. Querían producir cultura, conformar un grupo de experimentación que sirviera de fermento para otros grupos más amplios. Buscaban aquello que otorga vida a una forma de cultura, lo que está detrás de la cultura misma, para lo que consideraba que el actor necesitaba apartarse de los estereotipos de su propia cultura, trabajando al margen de los sistemas básicos de comunicación compartidos basados en palabras compartidas, códigos, hábitos culturales. Buscaban destruir los estereotipos para llegar a formas de expresión en las que el comportamiento del actor sea totalmente impredecible. No se trataba de una síntesis de los intercambios sino del contraste y la diversidad que conduce a la aparición de una creación completamente nueva, donde cada actor mantiene su identidad mientras se mezcla con otros y participa de una creación conjunta enteramente propia y nueva. Creatividad colectiva que, de ser sincera, podría ser percibida por cualquier espectador, una diversidad que sea espejo del público.

Sus mayores éxitos fueron sus originales escenificaciones de obras de Shakespeare —como Romeo, Lear, Timón de Atenas, El sueño de una noche de verano, Medida por medida, o La tempestad (ya en 1968, que rehízo en 1990)— o su experiencia con el Teatro de la Crueldad que culmina con su escenificación de Marat/Sade (1964) de Peter Weiss, o grandes puestas en escena personales, como El Mahabharata (1987).

Su trabajo incluyó, además, obras de Jarry, Chéjov (El jardin de los cerezos), Genet (El balcón) o Beckett (Días felices), creaciones a partir del neurólogo Oliver Sacks, piezas sencillas tomadas del mundo africano (que ha prodigado en los últimos años), óperas de Debussy (Pelleas) o de Bizet (La tragedia de Carmen, 1982).

El ideal expresado en su libro más antiguo y difundido, El espacio vacío, se fue plasmando de muy diversos modos, si bien en sus últimas piezas el despojamiento ha sido radical. Fue un creador que parte del teatro más elemental basado en gestos, decorados, movimientos, diálogos rápidos: Je me rapelle, Woza, Albert, El traje, Warum, warum (2008) y también en una pieza sobre Dostoyevski con mucho texto, El gran inquisidor.

Muchas de sus obras han podido verse en España y además él mismo se ocupó de filmar varias de sus representaciones, lo que le ha acercado al público. Así, con Marat/Sade La tragedia de Carmen, El Mahabharata.

Fue director del Centro Internacional para la Investigación Teatral en París. Sus representaciones se llevaron a cabo en un teatro quemado que él descubrió, al lado de la Estación de París Norte: Les Bouffes du Nord, donde desarrolló su tarea durante cuarenta años, no sin viajar al extranjero con su grupo de actores de las más diversas procedencias (africanos, japoneses, europeos).

Comentario

Peter Brook, uno de los directores de teatro más innovadores del mundo, que perfeccionó el arte de poner en escena poderosos dramas en lugares inusuales, falleció a los 97 años, informó el domingo su representante.

El director británico montó producciones que iban desde versiones desafiantes de Shakespeare a ópera internacional y poemas épicos hindúes. Brook representó obras en gimnasios, fábricas abandonadas, canteras, escuelas y antiguas fábricas de producción de gas en ciudades de todo el mundo. Peter Brook, director inglés:

 “Hoy, en un mundo de conflictos, escuchar es más importante que nunca”

Su producción de 1970 en Stratford de El sueño de una noche de verano de Shakespeare, representada toda de blanco y con un enorme columpio con guirnaldas, le aseguró un lugar en los anales de la historia del teatro. Según Le Monde, Brook, afincado en Francia desde 1974, falleció el sábado en París. Un comunicado de su representante confirmó la muerte el domingo.

Aunque Brook era considerado con admiración en los círculos teatrales, era menos conocido entre el público en general debido a su negativa a someterse al gusto comercial. A menudo rechazaba los edificios teatrales tradicionales en favor del espacio vacío, “por la posibilidad de transformarlo mediante la luz, las palabras, la improvisación y el puro poder de la actuación y la sugestión”.

Más sobre Arte

Su búsqueda de inspiración le llevó a lugares tan lejanos como África e Irán, y produjo una variedad de obras de teatro originales e improvisadas, marcadas por su ojo para el detalle y su enfoque desafiante.

Nacido en Londres el 21 de marzo de 1925, su padre era director de una empresa y su madre, científica. Dejó la escuela a los 16 años para trabajar en un estudio de cine y luego se fue a la Universidad de Oxford y se licenció en inglés y lenguas extranjeras. En 1970 se trasladó desde Reino Unido para trabajar en París, donde fundó el Centro Internacional de análisis Teatral, que reunía a actores y diseñadores de diversas nacionalidades. Brook siguió trabajando hasta los 90 años. “Toda forma de teatro tiene algo en común con una visita al médico. Al salir, uno siempre debe sentirse mejor que al entrar”, escribió en su libro de 2017 “Tip of the Tongue”

miércoles, 10 de febrero de 2021

ENTREVISTA:CHRISTOPH WALTZ | ACTOR DE 'MALDITOS BASTARDOS'.-a



"No hago más que lo que está en el guión"

ROCÍO AYUSO

Los Ángeles - 18 SEP 2009 - 01:00 CLT

No hace ni un año, a Christoph Waltz sólo lo conocían cuatro cinéfilos. Quizá no haya que extrañarse; es de apariencia gris, austriaco, de 52 años, algo canoso, repeinado y de facciones amables aunque poco reseñables. Entonces llegó Quentin Tarantino a ofrecerle su Malditos bastardos y gracias a ella obtuvo el premio al mejor actor en el Festival de Cannes por su Hans Landa, un coronel nazi tan políglota como sádico. Y a partir de ahí, catapultado a la fama. "No quiero pensar en el futuro. Puede parecer extraño, pero prefiero mantener mi inocencia", confiesa el intérprete, descrito por los críticos estadounidenses como "el hombre que salva" el último trabajo de Tarantino.

Waltz no es un John Travolta recuperado para Hollywood con Pulp fiction, ni una Pam Grier redescubierta para el gran público con Jackie Brown. Waltz es un actor normal, con una trayectoria normal, cuarta generación de intérpretes, preparación artística con Max Reinhardt en Viena y Lee Strasberg en Nueva York, y un flujo de trabajo continuo principalmente en series de televisión y teatro: 

"Mi deseo de ser actor fue una fijación en mi desarrollo. En términos psicológicos, se trata de ese periodo narcisista de la adolescencia, y que yo nunca superé".

"Actúo porque no he superado el narcisismo de mi adolescencia"

Revisionismo pop

Cómo cayó esta joya interpretativa en manos de Tarantino es tan simple como su carrera. "Una prueba de rodaje", resume sin más. También es un buen ejemplo de que los padres tienen razón cuando insisten con lo de que estudiar idiomas lleva lejos. Tarantino y su productor, Lawrence Bender, se estaban volviendo locos para encontrar a un actor capaz de hablar alemán, francés, inglés e italiano como lo hace Landa en la película. Waltz también sabe algo de esloveno y húngaro. El italiano reconoce que se lo inventa. "Ventajas de ser de un país pequeño que a dos o tres horas en coche te ofrece todos estos idiomas", vuelve a quitarse mérito. En realidad, reside en Londres desde hace años y su inglés es perfecto. Para él, "un actor no hace más que lo que está en el guión", y le da todo el mérito a Tarantino.

El austriaco asegura que es imposible encarnar a un nazi. "Uno no hace de nazi. Tampoco hace una comedia. Es imposible. Uno se pone el uniforme, eso es fácil, y se pregunta cuál es su papel. Y ahí se acaba todo. Lo desgrana hasta el último detalle. Y estará en el ojo del espectador ver a un nazi. O reírse de un chiste. Yo no juzgo. Lo mío es el proceso, no el resultado", explica, y confiesa que nunca antes quiso interpretar un personaje de nazi por ser un puro cliché.

Hollywood adora a Waltz, y por eso estará en la adaptación de Michael Grondy del cómic The green hornet. Su inmediata incorporación a ese rodaje es lo que le ha llevado a cancelar su visita al festival de San Sebastián. ¿Nervioso? Se ríe. "Cuando llegué a mi primera prueba con Quentin, le dije a mi agente en Berlín: 'Si esto es todo, ha sido maravilloso'. Entonces siguió creciendo y creciendo. En Cannes los flashes fueron 500 y la alfombra roja... ¿Había alfombra?"."Actúo porque no he superado el narcisismo de mi adolescencia"

sábado, 13 de junio de 2020

Giancarlo Espósito, el villano de “Breaking Bad”, a solas con Teleshow: “Yo he sufrido muchas veces cuando me decían negro y también le temí a la Policía” a

El actor que personificó al ya mítico Gustavo Fring vuelve con un personaje fuerte en la serie “Godfather of Harlem”, que habla de mafias, pero también de la lucha contra el odio racial


Por María Eugenia Capelo

Breaking Bad, la serie creada por Vince Gilligan no sólo nos regaló una de las mejores ficciones de la historia sino a varios personajes secundarios que supieron ocupar un lugar importantísimo dentro de la trama. Junto a Walter White y Jesse Pinkman, los nombres de Saul Goodman, Mike, "Los primos o Gustavo Fring formaron parte de esos personajes inolvidables. De hecho la serie contó con un spin-off, Better call Saul en el que varios de estos roles volvieron a tomar vida.
Giancarlo Espósito supo ser el dueño de “Los Pollos hermanos” y su Gus Fring se mudó también a la serie protagonizada por el contrvertido abogado Saul Goodman. Pero ahora el actor se animó a darle vida a un personaje real: Adam Clayton Powell, el reverendo y congresista que lideró el movimiento afroamericano junto a Malcom X y Martin Luther King, y la lucha por los derechos civiles.
En Godfather of Harlem, la serie de Fox Premium que estrena este 19 de junio a las 23, acompaña al ganador del Oscar, Forest Whitaker, que interpreta al mafioso Bumpy Johnson, uno de los jefes de la mafia afroamericana más notorios de los Estados Unidos. El resto del elenco lo completan Nigél Thatch como Malcolm X,Vincent D’onofrio y Paul Sorvino, entre otros.

En comunicación con Teleshow, Espósito nos contó sobre el desafío de interpretar y darle vida a este hombre que no fue tan reconocido mundialmente, pero que se consagró como un emblema de la lucha de los derechos civiles en los Estados Unidos.

—¿Conocías al personaje de Adam Clayton Powell Jr. antes de sumarte a la serie Godfather of Harlem?

—Estaba muy familiarizado con el personaje porque crecí en Harlem (New York). Hay una calle de hecho que se llama Adam Clayton Boulevard. Mi mamá era muy religiosa, iba mucho a la iglesia donde él daba sus discursos y siendo un niño pequeño, Adam Powell era sólo un predicador. Pero cuando fui creciendo me di cuenta que era uno de los líderes más importantes en el país. Y marcó la vida de muchos afroamericanos en su época, incluso lideró reclamos y protestas de asiáticos. Pero cuando empecé a investigar su vida para esta serie tomé realmente noción sobre lo que significó para los años 60. Estoy muy feliz de estar en esta serie porque puedo contar una historia que es extremadamente contemporánea hoy en día.

—Adam Powell tenía una personalidad contradictoria ya que por un lado luchaba por los derechos civiles pero por otro lado tenía sus descuidos y vicios…

—El desafío fue interpretar a un hombre que era profesional (abogado y también congresista) pero también era un ser humano y quería vivir su vida. Él pensaba: si los blancos podían hacer lo que querían, engañar, mentir, ¿por qué él no podría hacerlo?. Adam siempre fue transparente: parte de su filosofía era hacer lo que quería, siempre ser él mismo, lo que también implicaba, tomar, fumar, amar a muchas mujeres... Fue un ser humano muy complejo. Por eso fue muy emocionante para mí interpretar a alguien que no se avergonzaba de lo que realmente era. La gente no conoce a Adam Clayton Powell como conocen a Martin Luther King o Malcolm X. Por eso mi responsabilidad, era dar a conocer a este hombre. Durante mi investigación, leí los discursos de Adam Clayton Powell y recordaba en mi mente los discursos de Martin Luther King y al compararlos me di cuenta que ¡tenía las mismas líneas! Entonces me di cuenta que era rivales porque ¡se robaban los discursos!. Pero a pesar de eso, se respetaban. Lamentablemente la gente recuerda más a King que a Clayton Powell.

—¿Crees que este doble discurso hizo que la gente no lo recuerde?

—No sé. La idea de Adam era “Como cambiar el mundo y la sociedad”, a pesar de todos sus vicios. Era un hombre que decía lo que pensaba, ¿Cuántos de nosotros decimos realmente lo que tenemos en nuestra mente? Vivimos en un mundo donde la verdad no sale a la luz. Vivimos en Instagram, Twitter, Facebook subiendo actividades de nuestra vida pero no sabemos realmente quiénes son esas personas.

—Un personaje inolvidable para todos los amantes de la serie fue tu villano de Breaking Bad, Gustavo Fring el dueño de “Los Pollos Hermanos”, ¿Qué aprendiste de Gus?

—Yo estoy muy feliz de haber creado con Vince Vaughn a Gustavo Fring. Él era un personaje que se tomaba su tiempo antes de contestar. Me enseñó que actuar no es solamente memorizar una líneas, sino es aprender el ritmo de la personalidad de cada rol, es aprender el tiempo y entender las ideas y la visión del guionista. Y me di cuenta, al interpretar a Gustavo, que sus líneas estaban perfectamente escritas, y los actores amamos cuando pasa esto, pero también nos gusta poner nuestras propias palabras (risas). Y nuestro ego nos hace creer que lo haríamos mejor que lo que los guionistas pensaron. Y llevando a Gustavo a mi vida real, nosotros los seres humanos, nos leemos en nuestras miradas, gestos y sabemos cuándo hay una amenaza de algo en esas lecturas e inmediatamente sabemos si debemos estar a la defensiva o ser amables, sabemos cuál es la intención en su mirada o en su voz. Yo puedo decirte que soy una buena persona pero vos realmente ves si eso es real. Y eso me lo enseñó Gustavo.

—¿Y Cómo cambió tu vida después de Breaking Bad?

—Mira, realmente fui muy bendecido, sobre el camino que tomó mi carrera después de Breaking Bad. Tuve la oportunidad de mi vida en esa serie. Es como nunca lo solté a Gustavo, porque lo seguí haciendo en Better.... En seis u ocho episodios voy a terminar mi participación en esa serie y formará parte de mi pasado. Y seguramente será una triste pérdida. Tendré que dejar de interpretar a este hombre introspectivo, intimidante, que no expresa sus sentimientos.

—¿Creés que Godfather of Harlem servirá para entender los conflictos surgidos luego de la muerte de George Floyd y el #BlackLivesMatter ?

—Lo que pasa en nuestro país es inhumano. Y no tiene color lo inhumano. Estuve pensando toda esta última semana cómo mi visión sobre las mujeres ha cambiado, porque hoy en día las mujeres están en la primera línea de lucha más que nadie. Vi la gran familia de la humanidad diciendo que esto no puede seguir. Es criminal. Yo soy afroamericano padre de cuatro hijas mujeres y debo aprender algo para ellas también. Yo crecí con un padre dominante, patriarcal, sexista, yo lo amo, pero creció en una época diferente donde esas cosas se aceptaban. Mis hijas deben encontrar quiénes son dentro de este mundo, cómo van a ser de adultos y como futuras madres. Pero, ¿qué podría decirles cuando me preguntan si podían marchar en protesta por la muerte de Floyd? No podía negarme. Yo tenía miedo por la policía, por el coronavirus, pero entendí que debían hacerlo. Pero me molestaba conmigo mismo por no haberles podido decir que temí siempre por mi vida, por todas la veces que me paró la policía y me tiró al piso, o todas las veces que me dijeron “negro”. O las veces que la policía me pedía la licencia de conducir y cuando me veían el nombre me decían: “Ay te ví anoche en tal serie, seguí de largo, no hay problema”. ¿Eso es un privilegio porque me veían en la televisión? ¿De no ser así habría terminado en la cárcel?. Por eso compartir el dolor de nuestras experiencias, debe servir para transformarnos nosotros y movernos de ese dolor. Aplaudo cuando la gente protesta unida, contra la violencia de los policías y los políticos. Todo eso debe parar. Porque la gente decente no debe tener miedo. La gente no va a aguantar más estas cosas. Yo no es más un enfrentamiento entre tú y yo sino una unión de “nosotros”.

domingo, 2 de junio de 2019

Entrevista Aaron Paul: "Breaking Bad cambió mi vida" a


Aldo Ahumada Chu Han
'Mucha gente siempre me verá como Jesse': con Bryan Cranston en Breaking Bad

Rhik Samadder

Como el vendedor de metanfetamina de cristal de ojos salvajes del programa de culto, Aaron Paul se convirtió en uno de los antihéroes más inesperados de la televisión. Pero luego, como Rhik Samadder descubre, el actor está lleno de sorpresas.


Aaron Paul: "Viví y respiré cada momento de la vida de Jesse, y algo más".

TEl skinhead con ojos locos abre una escotilla oculta en el suelo para revelar una vista escalofriante: escalones de hormigón que conducen a un sótano vacío, paredes desnudas, tenuemente iluminadas. Del tipo que ves en las noticias. No es que esperara que Aaron Paul viviera en un trailer, cocinando metanfetamina en calzoncillos, pero esto es una sorpresa. Para aclarar, el resto de su casa de Hollywood es hermoso, acorde con la estrella de uno de los programas de televisión más exitosos de todos los tiempos. Breaking Bad rompió récords de audiencia y fue aclamado como la marca de agua en una época dorada de la televisión de larga duración. Bryan CranstonEl desempeño de Walter White, maestro de química convertido en narcotraficante, a menudo se describe como Shakespearian, pero fue el arco de combustión lenta de su protegido más flojo, Jesse Pinkman, lo que posiblemente fue más catártico. ¿Cómo se mueve un actor después de estar en una obra maestra? "Hablamos de eso todo el tiempo", admite. La forma en que describe el final suena casi dolorosa. “Fue casi perfecto. Brian y yo lo leímos juntos en su casa en Nuevo México. Cuando leyó la dirección de la pantalla 'fin de serie' nos quedamos en silencio durante 30 segundos ”.

Me encuentro con Paul antes en una larga mesa en su amplio jardín, en medio del sonido del agua corriendo. Él sonríe ampliamente, el sol brilla solo para él. Es extraño verlo feliz, con camisa estampada y pantalones cortos. “Sé lo afortunado que soy. Estoy en la cima del mundo." La brisa contrasta fuertemente con su presencia en pantalla. Allí, tiene una manía en sus ojos azules y piel enrojecida, amenaza en el gruñido devastado de su voz, pero también vulnerabilidad hermosa. Vemos al cachorro dentro del perro salvaje. No importa cuán intensa sea la situación, le crees como actor.

Es frustrante que desde ese final, no haya asumido un papel de peso. Hubo Exodus , una épica bíblica decepcionante de Ridley Scott, y Need for Speed , una relación de videojuegos abiertamente tonta sobre los corredores callejeros. Él produce la excelente caricatura BoJack Horseman y su próximo papel en Westworld debería encajar mejor. Pero a juzgar por las redes sociales, Paul parece ser el más apasionado de Dos Hombres , su colaboración mezcal con Bryan Cranston. Los fanáticos quedaron encantados con el anuncio de El Camino , una secuela independiente de la película Breaking Bad., que se transmite en Netflix a partir del 11 de octubre. Lo que podría sorprenderlos es que es solo la película de Jesse. Sin embargo, Paul confía en que haya suficiente historia que contar. “Viví y respiré cada momento de su vida que vimos, y algo más. Este es el papel de toda una vida ".

Debe ser extraño que un hombre en la mediana edad se identifique tan estrechamente con un traficante de drogas holgado y jadeante que jugó por primera vez a mediados de los 20 años. "Pensé que terminamos esa historia hace seis años", reconoce. "Y ahora volví a cerrar la piel". Pero seguía al escritor y director Vince Gilligan al fuego, y el apetito público era abrumador. “La gente era tan apasionada y quería respuestas. Preguntar cuándo será la próxima serie de Breaking Bad , puedes dejar de lado ese sueño, queriendo saber qué le sucede a Jesse. Y lo que le pasó a Jesse. Hay una clara sensación de que le debe al personaje una deuda vitalicia, por la adulación que recibe y el lujo que nos rodea. “Mucha gente siempre me verá como Jesse, y lo tomo como un cumplido. El espectáculo fue un cambio de juego ".




A diferencia de Jesse, el joven Aaron Paul Sturtevant siempre estuvo enfocado en la carrera profesional. El hijo menor de un ministro bautista del sur, creció participando en obras de teatro de la iglesia. La familia no tenía dinero, así que desde los 11 años comenzó a ahorrar en un frasco de vidrio al lado de su cama para mudarse a Hollywood. Sin interés en novias o cualquier otra cosa, se graduó un año antes y se mudó a Los Ángeles a los 17 años, donde su lindo rostro de muñeca comenzó a darle comerciales: alrededor de 50 lugares nacionales, incluso para compañías rivales. “Sé que hice Coca de vainilla; podría haber habido una Pepsi ".

Estaba ganando mucho dinero, pero no era lo que quería. Cuando tenía poco más de 20 años, se habían secado, a pesar de que estaba aterrizando como invitado en importantes programas: ER , The X-Files , NYPD Blue y un personaje recurrente en Big Love para HBO. Aún así, la realidad de ser actor rara vez es segura. "Exprimían todas mis escenas en un día, así que estaba ganando alrededor de $ 600 por episodio". Describe la edad de 27 años como el punto más bajo de su carrera: había hecho seis pilotos fallidos ese año y no podía pagar sus cuentas. Fue entonces cuando la audición para Breaking Badllegó a través de. Se suponía que su personaje no sobreviviría la primera temporada, pero cuando Vince Gilligan observó la creciente química entre Paul y Cranston, ajustó su plan. Las calificaciones para el programa fueron inicialmente modestas, pero las críticas fueron excepcionales. "Cuando las tres primeras series llegaron a Netflix , mi vida cambió".
El boca a boca y la aclamación crítica vieron el espectáculo convertirse en un fenómeno, atrayendo a los fanáticos por la legión. Todavía celebran fiestas de cribadores, elaboran teorías de tramas en tableros de mensajes, hacen arte de bricolaje, exhiben tatuajes en el pecho de Walter y Jesse cocinando metanfetamina. La pareja se convirtió en héroes interminables memed-cultural. (Hace solo unos días, un colega mío que ha visto la serie tres veces mencionó que poseía figuras de estilo Lego con sus trajes de metanfetamina, y me preguntó si los traería conmigo para firmar. No lo hice. t.)

Fue una locura estar en el centro de todo, dice Paul. Exponer como artista, también. “Al comienzo de mi carrera no era genial. Incluso al comienzo de Breaking Bad , estaba bien, conseguí el trabajo. Pero crecí tanto como actor. Todos lo vieron ". Él acredita trabajar junto a Cranston, describiéndolo como mentor. Su historia es narrativamente satisfactoria: a medida que Walter se adentra amargamente en el villano, su ex alumno de bajo rendimiento se convierte en un héroe. Pero la historia resuena a un nivel más profundo que eso. El actor se veía tan joven en esos primeros episodios. Es poderoso, ver cómo el latido se vuelve bueno, porque alguien creyó en él una vez: la parábola del hijo pródigo.
O tal vez la gente simplemente piensa que el espectáculo es una maravilla. Paul recuerda haber estado en un concierto con un viejo amigo que no había visto en mucho tiempo y que estaba en medio de una crisis. “Descubrió que su prometida lo estaba engañando y me dijo que habían cancelado la boda. Lo estoy abrazando, está llorando. Esta chica borracha se acerca y grita "YO, PERRA! ¡Déjame sacarte una foto, perra! [Una referencia al eslogan políticamente incorrecto, aunque innegablemente divertido.] Paul intentó hacerle saber que no era un buen momento, mientras protegía la privacidad de su amigo. “Ella dice: '¿No vas a tomar una foto? Eres un imbécil, ¿quién te crees que eres? ¡Jódete! '”Él está consciente de que en algún lugar, ella pasará la historia desde su punto de vista sobre Aaron Paul, el arrogante idiota.

¿La atención obsesiva que la gente le presta al espectáculo alguna vez es demasiado? "Al menos les gusta", se encoge de hombros. Es difícil penetrar la encantadora técnica de entrevista de una estrella que no quiere alienar a su base de fanáticos. Pero hay un aspecto extraño en el que Paul se presenta a sí mismo como un tipo normal sin problemas. Me resulta imposible de creer. Es demasiado bueno para habitar en la angustia, para ser torturado. Tiene que venir de algún lugar profundo. Noté muchas cosas de payasos cuando entré: figuras de Pierrot, una historia de la mesa de centro del circo. ¿De qué trata eso? "Me encanta el Cirque du Soleil", dice. Hmm ¿Qué tal el extraño retrato en las paredes, trabajos inquietantes de los artistas Mark Ryden y Lola Gil?? Paul no entiende por qué la gente los encuentra espeluznantes. "Es solo un bebé montando un cordero".

Sondeo un poco más profundo, tratando de descubrir qué hay en su sótano, por así decirlo. ¿Cómo fue ser criado en una casa religiosa devota? "Muy intenso. Mi padre me hizo citar las escrituras. Todavía tengo múltiples escrituras en mi cabeza ". ¿Cuál es su favorito? "No tengo un favorito", dice rápidamente. No es religioso y no quiere decirle a nadie cómo pensar. Me pregunto qué piensan sus padres de que su hijo sea un ícono para los meth-heads. Son fanáticos de Breaking Bad , me asegura, aunque hay proyectos suyos que no les gustan. ¿Necesitas velocidad ? Si Paul se ofende, no lo deja ver. “No, aman Need for Speed . Pensaron que era una película divertida ".

Entonces, ¿de dónde diablos proviene esa intensidad y acceso a la emoción? Solo tienes que actuar, me dice Paul. Oblígate a creer que una situación es real. Se ve divertido y se disculpa, como si lamentara no poder ayudarme con mis preguntas. “Algunos actores piensan en cachorros muertos. Yo no."

Me pregunto por qué estoy tan apegado a la idea del artista torturado, resolviendo sus demonios a través de su trabajo. Supongo que tenemos hambre de la historia debajo de la historia. Es posible que realmente esté tan feliz. ¿Quién no sería? Paul acaba de regresar de una fiesta de 10 días para su 40 cumpleaños, celebrado en un resort privado en la República Dominicana con amigos cercanos, incluidos Bryan Cranston y Michelle Monaghan . Ha ganado varios premios Emmy y está preparado financieramente de por vida. Pero la fuente de su dicha es mucho más pequeña.
Su nombre es Story, su hija con su esposa Lauren Parsekian . El joven de 19 meses ha sido encaramado en su regazo, pero desaparece por unos minutos para abatirla. Nunca había querido tener hijos, admite cuando regresa, aunque su pareja sí. Tenía poco más de 30 años, miedo de renunciar a su libertad. “Gracias a Dios cambié de opinión, hombre. Mi vida comenzó cuando ella nació ". Sus ojos azules están iluminados. Oportunamente, fue la actuación lo que provocó la conversión: interpretar a un padre de dos en The Path , el programa cancelado de Hulu sobre un líder espiritual que experimenta una crisis de fe.

Trabajar con actores jóvenes que lo abrazarían, entrando en la mentalidad de ser un cuidador, hizo que Paul se diera cuenta de que estaba abierto a la idea de ser padre. Mantuvo la revelación en secreto de su esposa durante seis meses. Cuando finalmente se lo contó, ella le hizo repetir las palabras. Se había casado entendiendo que una familia no estaba sobre la mesa, había elegido una vida con él, en lugar de tener hijos con otra persona. “Después de tener un hijo, me doy cuenta del sacrificio que fue. No lo había entendido ”, dice.
Está hablando con una energía y sinceridad que ingenuamente pensé que compartiríamos discutiendo un programa de televisión. “A través de los ojos de los bebés, ves una sensación de asombro en el mundo al que te has acostumbrado. Al escuchar los latidos de su corazón por primera vez, ver el parto, darles de comer en medio de la noche, todo es ... tan poderoso. Un asiento de primera fila para el mejor espectáculo del mundo ".

¿Uno que es incluso mejor que Breaking Bad ? De esto se trata la vida, confirma, ante el inevitable descargo de responsabilidad. "Los niños no son para todos". Había tenido otras preguntas sobre la película y la actuación, pero ahora se sienten peatonales. ¿Es este el final de la historia de Jesse? (Probablemente). ¿Hay algún trabajo que no le interese? (Comedia Slapstick, aunque no tiene nada en contra). ¿Quién es su actor favorito? (Brad Pitt, un actor de carácter disfrazado de protagonista). ¿Cuánto de las palabrotas de Jesse se debió a él? ("El 100% de esas perras fueron escritas. Ni una vez improvisé una 'perra'").

Creo que finalmente hemos avanzado. Paul me pregunta si quiero dar un paseo. El jardín es una colina entera con camas escalonadas de enormes plantas tropicales y cascadas. Admiramos un estanque de carpas koi, uno de los cuales se llama Thom Yorke. Enormes mariposas ondean perezosamente a nuestro alrededor; libélulas destellan como joyas en el sol. "También tenemos un lugar en el río en Idaho: las libélulas aterrizan allí", reflexiona. Es hermoso, suspiro. “Sí, siempre dos de ellos, teniendo sexo. Usarte como un ancla ”, finaliza.

Está ajardinando el jardín curvo para su ventaja natural, creando un anfiteatro verde y exuberante para que toquen sus bandas favoritas. Esto es algo que la pareja amante de la música siempre ha hecho, presentando sets íntimos de actos de estadios y pequeñas bandas independientes para familiares y amigos. (Me muestra su teléfono, su esposa se salva como "Lauren Coachella", por el lugar donde se conocieron). Parsekian es presidente de Kind, una organización sin fines de lucro contra el acoso escolar. "Ha sido un privilegio verla convertirse en madre", dice. “Y me pongo bien ser padre. Ahora no se trata solo de trabajo ”, explica.
Regresamos a la casa, una villa clásica de Hollywood con frescos muros de piedra y techos de madera decorados. Es el más antiguo en el área inmediata. Habiéndose mudado hace cinco meses, planean quedarse aquí para siempre. No es difícil ver por qué. Me lleva a una habitación lateral que contiene sus preciadas posesiones: en los estantes veo sus brillantes premios Emmy y el oso rosado quemado que cae del cielo en Breaking BadLa segunda temporada. Pero no son lo que él quiere que vea. Él realmente ama beber, me dice mientras abre una puerta a un lado. Detrás hay otra puerta de seguridad de tamaño completo, que él abre. En el interior, un armario está lleno de antiguas botellas de licor envueltas en arpillera. Es genial, pero hay más. "La casa fue construida durante la Prohibición", explica. Bajando la mano, mueve un pequeño pestillo disfrazado que se encuentra en una esquina. El piso se abre y revela los escalones de hormigón desnudo que conducen a una habitación secreta. Es un bar clandestino. También empiezo a reír, por la sorpresa. Paul tiene la intención de diseñar el bar él mismo y hacer fiestas aquí. Es fácilmente la cosa más genial que he visto.

Entonces, ¿se va a refugiar con su familia y beber? No, habrá actuación. Pero aprendió a ser exigente, solo asumiendo un trabajo que lo desafía. Se enorgullece de usar diferentes pieles, siempre se ha visto a sí mismo como un actor de personajes.

“Hay roles a los que salté después de Breaking Bad , solo para tratar de mover la aguja en una dirección u otra. Me envían muchas cosas de personajes principales y eso no me emociona. Mi corazón está en el cine independiente y arenoso "
Él quiere ser arrastrado por el barro, dice. 
"Verás mucho más de eso en mi carrera de ahora en adelante". 
Me dice que ha estado jugando con la idea de la transformación física para su próximo papel.

"Tengo un paréntesis de año y medio entre temporadas de Westworld : tiempo suficiente para acumular un montón de peso y perderlo, si quisiera"
. Todavía está decidiendo si tiene el coraje para ello. Disfruta de la libertad artística del éxito: la capacidad de moverse a su propio ritmo, el poder de elegir. También aprendió que hay más en la vida que actuar.
No estoy convencido de que no haya un poco de oscuridad en él. Cuando me voy, pasamos las figuras de circo y le pregunto sobre ellas nuevamente.
 "No le tengo miedo a los payasos", dice rápidamente. "Pero la idea de un payaso en una fiesta ..." se queda mirando por unos segundos, con los ojos azules entrecerrados en sus pensamientos. Me pregunto si está reviviendo un recuerdo. O tal vez imaginando cómo interpretaría a un payaso y lo que podría revelar. Está en otro lugar por unos segundos, antes de regresar a la habitación. "No tengo nada contra los payasos", dice. Por una vez, no estoy seguro de creerle.

domingo, 18 de noviembre de 2018

Mano de obra, de Diamela Eltit: el origen de la rabia social contra los supermercados.-a


Por: Rodrigo Miranda, periodista y escritor / Publicado: 22.10.2019

Por esas sincronías entre arte y política, la versión teatral de la novela Mano de obra que Diamela Eltit sitúa en un sùpermercado, se acaba de reestrenar en el Teatro UC con puesta en escena de Alfredo Castro. La obra transcurre en una comunidad de emergencia de viviendas mínimas, un conventillo globalizado. Un hacinamiento de pelucas rubias, trajes de promotoras y texturas plásticas. La grotesca imaginería ayuda a entender mejor las reglas del juego del modelo social que vivimos y la relación del individuo con el mercado, el ciudadano devenido en consumidor.
La democracia cayó. El Estado falló. Volvió la dictadura. Piñera habló primero con los empresarios dueños de supermercados antes que con las fuerzas sociales. Esas son sus prioridades y urgencias frente a la crisis social: asegurar y defender –vía militar– el afán de lucro sin límite de los negocios de la élite.  

Bienvenidos a la tercera fase del capitalismo a ultranza, el financiero, que persigue el beneficio mediante la especulación, el trabajo precarizado a niveles infrahumanos, el maltrato sistémico y el sometimiento social. De ahí la pérdida de todos los derechos sociales y cívicos de los trabajadores, al límite de la esclavitud moderna. 
Bienvenidos a Mano de obra, la visionaria novela de la Premio Nacional de Literatura Diamela Eltit publicada el 2002. La dictadura del neoliberalismo salvaje tiene como epítome el supermercado, alegoría del espacio laboral contemporáneo hiperexplotado. El “super” alberga a una ciudadanía que perdió su herencia ideológica y evade la realidad con las banalidades ofrecidas por las pantallas y el consumo desenfrenado.
Lo primero que llama la atención de la novela es el registro del lenguaje aniquilado de las trabajadoras y trabajadores chilenos de hoy, sujetos sin voz ni discurso, sin habla, sin memoria ni pertenencia.
La obra parece haber presagiado el estallido social que se avecinaba y coincidir con una escena clave de la serie inglesa de la BBC Years and Years:
“Nosotros tenemos la culpa de todo. Nosotros somos responsables, cada uno de nosotros. Podemos pasarnos todo el tiempo culpando a otros, a la economía, como si no tuviésemos el control y fuéramos impotentes. Damos nuestro dinero y participamos en este sistema de por vida. Lo soportamos. Lo permitimos. Es nuestra culpa. Es el mundo que construimos”. 

Con una jornada laboral extenuante, en Mano de obra los trabajadores de supermercados tienen prohibido orinar y debe aguantar 14, 16 o 24 horas sus necesidades fisiológicas. Han perdido sus irrenunciables derechos por miedo al despido y la cesantía. 
“Si pedimos permiso pa hacer un trámite, si salimos a respirar, si nos apoyamos en los estantes, si engullimos un dulce, si nos sentamos a cagar en el baño, si nos da hambre y sacamos un yogurt vencido de los refrigeradores, si nos faltan las fuerzas, nos despiden en el acto. Ni mear pueo. Me le está haciendo mierda la vejiga. Viejo chucha su madre que no me deja ir al baño. Estoy encadená a la caja”, dice el personaje de una promotora. 
Su otrora habla política e ideológica es reemplazada por la pasividad, una retahíla de garabatos sin contenido, el slang lumpen, el argot flaite del marginado y la periferia. La desmemoria y el neoliberalismo fracturan su lengua, la vuelven extraña, la desajustan. La lengua materna rota, partida en dos, desollada, castigada, famélica.
“Aunque nos quiten días de trabajo, aunque nos sigan bajando los sueldos y nos atropellen, tenemos que soportar, necesitamos el salario para sobrevivir”, agrega el personaje de la promotora en el gueto horizontal donde vive, un galpón infecto y decadente, un cuchitril de piezas diminutas, tabiques y subdivisiones hechizas. 
Al ser trasladada a la sección del super donde destripan pollos, otra promotora se mutila un dedo con un hacha mediante un corte perfecto y profundo. Mientras la sangre corre a borbotones en el mesón, el dedo perdido termina depositado entre aborrecibles restos de pollo. El cuerpo de la trabajadora sufre los estragos de la hiperexplotación.
Las escenas se titulan Verba Roja, Luz y Vida, El obrero Gráfico o La Voz del Mar, nombres de diarios sindicales del principios del siglo XX, la prensa de los trabajadores chilenos que representaban el desaparecido pensamiento y patrimonio político de la clase popular, época marcada a fuego por persecuciones y matanzas. El habla lesionada se combina con una poderosa imaginería de cuerpos vigilados, castigados, estirilizados. En Mano de obra leemos la lengua sitiada y los cuerpos obreros hechos pedazos, exterminados y necrotizados por la macroeconomía.
Como toda novela de Diamela Eltit, Mano de obra es atemporal y retrata con precisión la actualidad. Recordemos el origen de la palabra trabajo. Viene de trepalium (tres palos, en latín), cepo de tres puntas que se usó en el Imperio Romano para castigar esclavos rebeldes. Quizá ese horror es la génesis de la asociación del trabajo con “pega”, sufrimiento o tormento, sensación exacerbada en estos tiempos neoliberales que corren.
Por esas sincronías entre arte y política, la versión teatral, con puesta en escena de Alfredo Castro, se acaba de reestrenar en el Teatro UC.
Escuchamos una tradicional canción chilena interpretada en arpa y sirenas policiales. Miedo y represión. La actriz Amparo Noguera encarna a una promotora del super con peluca “rucia” y disfrazada de huasa izando una bandera chilena. Sin derecho a huelga ni a sindicalizarse, en un gesto de insurrección Noguera alza el puño de la mano izquierda tres veces y luego se reprime y vuelca la cara hacia la pared tapándose el rostro con las manos.

Obra

La obra transcurre en una comunidad de emergencia de viviendas mínimas, un conventillo globalizado. Un hacinamiento de pelucas rubias, trajes de promotoras y texturas plásticas. La grotesca imaginería ayuda a entender mejor las reglas del juego del modelo social que vivimos y la relación del individuo con el mercado, el ciudadano devenido en consumidor, como si fuera un aterrador capítulo chileno de Black Mirror. Admirable es el desempeño siempre punzante del resto del elenco: los actores Taira Court, Paola Giannini, Rodrigo Pérez, Marcial Tagle y Jaime Leiva.
El reestreno de Mano de obra nos recuerda que el teatro es un espacio donde la memoria del cuerpo de los actores construye un proyecto estético, social y político, a través del despliegue de una trama de signos y dispositivos. Mediante estas maniobras de urdimbre rebelde se tejen luchas personales contra la desigualdad, la inequidad y las exclusión que genera el sistema. El regreso de esta obra es un acto más de esa resistencia de la creación artística. En tiempos dictatoriales, de populismo penal y violencia militar, el teatro es un ejemplo de esfuerzo colectivo y de la construcción de un proyecto común basado en la colaboración y la solidaridad.

viernes, 1 de junio de 2018

Better Call Saul Q&A — Vince Gilligan (Co-Creator, Director) a






Vince Gilligan, el co-creador de Better Call Saul y el director de "Bagman", habla sobre los desafíos de asumir este episodio masivo, cómo fue tener a Jimmy en una escena con los primos y lo feliz que es ser de vuelta en la sala de escritores para la temporada 6.


Q: Este es uno de los episodios más locos de la serie hasta la fecha. ¿Fue una coincidencia que hayas dirigido esto, o tuviste un ojo en ello?



A: Me siento muy halagado al pensar que Peter Gould tenía su gorra puesta en mí dirigiéndome tan pronto como la estaban rompiendo en la habitación. Me siento halagado, pero también estoy un poco traumatizado por todo el asunto. Esta fue la cosa más difícil que he dirigido en mi vida, y esto salía de mi primera película, El Camino. Pensé que sería lo más difícil y fue sin duda lo más largo porque era una película, pero este Episodio 508 fue un trabajo tan duro como el que he tenido.


En realidad no sabía qué iba a pasar en el episodio. Peter y Gordon Smith, que hicieron un trabajo tan maravilloso escribiendo el episodio, y todos los otros escritores se topaban conmigo de vez en cuando y decían: "Oh, no podemos esperar a que veas 508", porque ese punto que acababa de decir, "Asignarme un episodio" [y] creo que puedo hacerlo desde esta fecha hasta esa fecha. Eso es lo que coincidió con esto. Y simplemente parecía seguir aumentando y aumentando cada vez más y más cada vez que me los encontraba. Peter se frotaba las manos y decía alegremente: "Oh, no puedo esperar a que veas lo que va a pasar, es enorme, es enorme". En cierto momento estaba pensando: "Oh hombre, esto suena como si me estuvieran preparando para ser asesinado". Ni siquiera sabía lo que iba a pasar en el episodio. Simplemente sabía que tenía lugar principalmente en el desierto y se centraba principalmente en Jimmy y Mike, y eso es todo lo que sabía, y lo mantuve así a propósito, pero también porque estaba ocupado con la postproducción de la película. Pero realmente me sorprendió cuando lo leí y dije: "Oh, Dios mío, ¿cómo vamos a hacer todo esto?"


Q: ¿Cómo te acercaste a dirigir este episodio sabiendo que se centraría en el primer trabajo de Saúl con el cartel y desentrañarlo desde allí?


A: Estaba fascinado por el guión. El guión me pareció un verdadero cambio de página, como lo son todos. Y aparte, me gustaría decir que me hubiera encantado dirigir cualquiera de estos 10 episodios porque creo que esta es una de las mejores temporadas de televisión de todos los programas de la historia del medio. Creo que lo que Peter y los escritores inventaron esta temporada es simplemente sobresaliente, y me siento afortunado de ser una pequeña parte de eso, habiendo servido como uno de los directores. Supongo que la respuesta a la pregunta es que siempre lo abordas en términos de cuál es la mejor manera de contar la historia. ¿Qué herramientas vas a necesitar para contar una historia?

Probablemente no estaba pensando realmente en términos de que esta es la primera salida de Jimmy como amigo del cartel, pero estaba pensando en términos de la pura logística de esta cosa, que era un oso. Solo la idea de que estaremos disparando en este lugar en un clima extremadamente caluroso, a kilómetros de la fuente de agua más cercana, en una tierra donde hay tarántulas y escorpiones. Podría asarse hasta la muerte y luego morir de golpe de calor y deshidratación porque esta es una tierra que, si se dejara caer en este lugar sin una cantimplora, sin un sombrero con un gran ala, probablemente estaría muerto dentro de un una hora y media. No lo estoy exagerando. Pero lo que más me da miedo es el cholla. Ese cactus en particular tiene espinas espinosas más largas que un palillo de dientes y afiladas como agujas, y eso es lo que Jimmy golpea su dedo del pie por accidente. Esas cosas son tan aterradoras. Prefiero estar cubierto de tarántulas que caer en una de esas chollas. Sería increíblemente peligroso.

No me atribuyo el hecho de que nadie resultó herido. Todo esto se debe a nuestros maravillosos productores, todos ellos, sin duda Melissa Bernstein y Princess Nash y Rob Overbeck y nuestro maravilloso AD, Efrain Cortes. El trabajo del subdirector, en primer lugar, es asegurarse de que la tripulación permanezca segura. Realmente vale la pena repetir que lo más importante de este episodio, o de cualquier episodio, pero este se destacó con gran alivio, es mantener a las personas seguras porque, al final del día, es solo un programa de televisión. Es un excelente programa de televisión del que no podría estar más orgulloso, pero no vale la pena lastimar a una persona. Y este episodio, más que cualquier cosa que haya dirigido, dio lugar a muchas oportunidades para el desastre, y realmente es un crédito para nuestros productores y para Efrain que nadie resultó herido. Eso es lo que estoy más agradecido.

Q: Jimmy decide contarle a Kim sobre este trabajo. ¿Es importante para él cumplir con su "promesa de matrimonio" o cree que parte de él está asustado y con ganas de compartirlo con alguien?


R: Creo que Jimmy está tratando de mantener su voto de matrimonio aquí, esta promesa de que le hizo a Kim antes de que se casen que sería honesto con ella, pero es una pregunta interesante. Realmente no lo había pensado de esa manera, la forma en que lo redactó hace un momento. Tal vez en algún nivel él quiera desahogarse y contarle sobre esta cosa que lo tiene nervioso, tal vez en parte solo para evaluar su reacción, solo para ver exactamente qué tan abiertos están sus ojos cuando escucha esto, y tal vez lo asusta más. todavía. Todos tenemos una tendencia a racionalizar nuestro comportamiento, y creo que eso es lo que Jimmy está haciendo en este momento. Está racionalizando que va a estar bien y que puede manejarlo y que solo es un simple viaje al desierto, que creo que es lo que Lalo le dice. Por supuesto, resulta ser mucho, mucho más que eso.


Q: Tenemos a los primos y Jimmy reunidos para la entrega inicial del dinero. ¿Qué se siente al dirigir estos caracteres opuestos polares: dos que nunca dicen una palabra y uno que no puede dejar de hablar?


A: Eso fue muy divertido. Sí, un chico habla lo suficiente para los tres y algo más. Fue muy divertido ver chocar esos dos mundos. Me sentí muy afortunado de ser el tipo que dirigía esa escena. La mayor parte del episodio tuvo lugar en los boonies, en la reserva india To’hajiilee, que es muy hermosa. Y debe tenerse en cuenta que To’hajiilee, donde filmamos la mayor parte del episodio, es donde Walter White y Jesse Pinkman cocinan metanfetamina por primera vez en el episodio piloto de Breaking Bad, por lo que fue como la vieja semana en casa. Excepto que fuimos a una parte de To'hajiilee que estaba literalmente, no lo sé, a 45 minutos en auto más adentro de la tierra de nadie y realmente estaba allí en el medio de la nada y casi parecía que estábamos en un lugar completamente diferente a pesar de que era la misma reserva. La escena con los primos conociendo a Jimmy por primera vez fue filmada en un área muy diferente que estaba a la vista de nuestros estudios de sonido de Q Studios, así que ese día en particular, estábamos filmando con Q Studios a nuestra derecha y la ciudad de Albuquerque a la vista a nuestra izquierda, y tuvimos que hacer un pequeño truco digital para borrar partes de la ciudad que se encontraban en el lado izquierdo del plano general, del plano general.


Pero tener a esos tres tipos juntos fue muy divertido. Amo a Daniel y Luis [Moncada]. Son tan bondadosos, dulces chicos. Es muy divertido estar en un set y simplemente pasar el rato y, en la vida real, son tan tontos y habladores como Jimmy McGill como personaje. Bob es un hombre encantador, pero no lo es, pero por naturaleza es un poco más tranquilo en la vida real, y los dos primos atemorizantes que nunca dicen una palabra son algo tontos y bulliciosos en la vida real. Son todo lo contrario de sus personajes, estos tres tipos, así que fue divertido, cuando comenzó la escena, escuchar a Jimmy haciendo su golpe una milla por minuto. Tuve la gran suerte de tener a Gordon Smith, el escritor, en el set todo el tiempo, así que me estaba ayudando con cada disparo. El era indispensable. Y hay una cierta cantidad de diálogo escrito en el guión de Gordon, pero estábamos viendo la escena y pensando, caramba, ¿no sería divertido si Jimmy hablara un poco más aquí, así que creo que un par de esas líneas divertidas podrían no haber estado en la secuencia de comandos. Son solo cosas que Gordon y Bob inventaron en el acto.


Q: ¿Qué crees que Jimmy está pensando cuando aparece Mike de todas las personas? ¿Por qué es importante juntar a estos dos para este traumático viaje?



R: Como fanático del programa, he estado esperando ver a Mike y Jimmy juntos durante mucho tiempo, y sé que esto ha sido una esperanza por parte de Peter y los escritores durante muchas temporadas. Amamos a Mike y amamos a Jimmy, y son como juntar el chocolate con la mantequilla de maní. Son geniales juntos, pero sus vidas y sus elecciones de vida y sus carreras los han llevado, a medida que la serie ha progresado, en direcciones muy diferentes, por lo que no pueden aplastarlos artificialmente. Tienes que dejar que las fichas de la trama caigan donde puedan, por así decirlo, y creo que la mayor emoción para todos los involucrados, incluido yo también con la llegada del guión, fue que presentó esta oportunidad para que estos dos chicos estuvieran juntos. más de lo que han estado juntos en un solo episodio, y esa fue probablemente mi cosa favorita al respecto.



Q: Jimmy casi recibe un disparo y finalmente tiene que beber su propio pipí para sobrevivir. ¿Por qué alguien iría al desierto en tus shows?



R: Mi respuesta es que iré al desierto cuando Peter Gould me lo diga, pero si alguna vez me pide que lo vuelva a hacer, la próxima vez habrá muchos más retrasos. Te puedo decir eso seguro. Fue duro, pero sí, en lo que respecta a nuestros personajes, probablemente también deberían mantenerse alejados del desierto. Es una tierra hermosa pero mortal en la que nada bueno sucederá cuando estés en Breaking Bad or Better Call Saul. No hay nada bueno en salir del desierto.


Q: Hubo un tiroteo gigante y un increíble accidente automovilístico en este episodio. ¿Cuál fue el mayor desafío al dirigir este episodio?



A: Fue una locura difícil. Fueron dos de las piezas más grandes del set, una en particular en el tiroteo fue probablemente la escena más grande de una pieza del set que he dirigido. Entonces, incluso en un clima de 72 grados, con un montón de Gatorade a mano y otras cosas, dentro de un escenario sonoro, esa hubiera sido una escena difícil para mí. En el mejor día posible en las mejores circunstancias posibles, ese tiroteo habría sido lo más importante que he hecho como director, y además, tuvimos que hacerlo en medio de la nada con un gran muchas privaciones dispuestas contra nosotros. Fue difícil.

La buena noticia es que tuve tiempo para hacerlo. Creo que tomó cuatro días y medio a cinco días filmar esa única escena, solo la escena del tiroteo, que es increíble en un horario de televisión. Si esto hubiera sido una película, esa escena de cuatro días y medio a cinco días probablemente se habría filmado de ocho a 10 a 12 días fácilmente, y simplemente lo hicimos funcionar. Simplemente lo hicimos posible y lo hicimos rápido, gracias a este asombroso equipo que tenemos, el mejor equipo en el negocio.
Y luego el papel del cañón fue una meguilla de una secuencia, y tuvimos a Corey Eubanks, el artista de cañones más importante del mundo, conduciendo nuestras acrobacias y él fue nuestra arma secreta durante esa escena: él y Al Goto, nuestro coordinador de acrobacias, y sus personal. Nuevamente, contrata a los mejores y luego aléjate y déjalos que te vean bien, y, en este caso, este cañón que Corey sacó fue perfecto. Fue increíble, y el hecho de que Corey y Al lograron esto en un camino de tierra, que creo que es una de las mayores preocupaciones, por lo general, quieres hacer un cañón en una carretera compacta o asfaltada. Logísticamente, debe tener un área mapeada con coordenadas GPS donde pueda aterrizar un helicóptero Medevac cuando haga algo como esto. Tienes que tener una ambulancia en el lugar. Tienes que tener chicos listos para apagar incendios, literalmente. Quiero decir, solo la logística que entró en esto, y no me doy crédito por nada de esto. Ser director es el mejor trabajo del mundo porque se te ocurren las tomas que quieras obtener y luego las dibujas tal vez en un papel y luego te alejas y te comes un sándwich, y toda la gente increíble del equipo tiene has estado haciendo el trabajo duro y estás pasando el rato a la sombra, haciendo que alguien te rocíe con agua helada o algo así. Es un gran trabajo. Lo recomiendo mucho.


Q: ¿Qué es lo que más te entusiasma cuando este programa se dirige a su temporada final?




A: Lo que más me entusiasma de la temporada 6 es que soy parte de ella nuevamente. Estoy de vuelta en la sala de escritores y, mientras me entrevistan aquí, estamos trabajando en la sala de escritores en la temporada 6. Estamos tomando nuestro descanso para almorzar en este momento exacto y, en unos 15 minutos, nos vamos para volver a eso. Y, por supuesto, como saben todas las personas que leen esto, tenemos este aterrador virus COVID-19, por lo que estamos, por primera vez, en nuestra sala de escritores con la ayuda de la tecnología. Estamos usando la teleconferencia, y es un poco complicado. No nos encanta la teleconferencia; preferiríamos estar todos juntos en una habitación. Pero estoy emocionado. Incluso en una pantalla de televisión, estoy emocionado de volver a trabajar con estas personas nuevamente. He olvidado lo que es estar en una sala de escritores, así que me he oxidado un poco. Ya llevamos casi tres semanas y todavía siento que no estoy seguro de encajar completamente, pero me lo estoy pasando bien. Y eso es lo que más me emociona. Creo que será un día agridulce cuando la serie termine al final de la temporada 6, pero creo que será una gran temporada de televisión y estoy orgulloso de ser parte de ella y no podría estar más feliz de Vuelvo a la habitación con todos. Peter y los escritores tomaron esto que se nos ocurrió hace años y, hombre, acaban de salir corriendo.

lunes, 9 de octubre de 2017

Toni Servillo: "El teatro es un misterio, el arte de perderse y volverse a encontrar" a

El actor italiano clausura el Festival de Otoño a Primavera con 'Elvira',
 una lección interpretativa de Louis Jouvet

A Toni Servillo no le gusta que le hagan fotografías. "No tiene paciencia con los fotógrafos ni las cámaras", comentan. Eso explica por qué una de las grandes estrellas europeas apenas acepta hacer reportajes en revistas, pese al carisma que derrocha. Su imagen en la sala Alcalá 31 con gafas oscuras y un purito (sin encender) entre los dedos bastaría para ilustrar la palabra cool. La cámara de Sorrentino le encumbró como Jep Gambardella, un personaje que se quedó en la retina de todo cinéfilo, pero él no es un hombre de imágenes, sino de palabras.
 En definitiva, de teatro. "En cualquier escenario me siento en casa. Hice mi primera película importante a los 40 años y cerca de los 60, he hecho 20". En cambio, sólo el pasado mes de enero protagonizó tres obras diferentes en Nápoles: una en un teatro off en un barrio poco recomendable, otra en la parte alta y más burguesa de la ciudad y, además, actuó en el legendario Teatro San Carlo, uno de los templos italianos de la ópera. "Es como si aquí hubiera actuado en el Teatro Kamikaze, el Teatro Español y el Teatro Real", resumió.Servillo ha venido a Madrid para para clausurar el Festival de Otoño a Primavera con Elvira una pieza que precisamente supone una masterclass interpretativa. En el montaje, que dirige el propio actor, se recrean las lecciones que el maestro Louis Jouvet impartió a la actriz Paula Dehelly mientras montaban el Don Juan de Molière en el París ocupado por los nazis. 

Teatro dentro del teatro, sí, pero Servillo quiso dejar claro que su función era mucho más que eso. "Con Elvira no queremos hacernos los pelmazos diciendo que el teatro es maravilloso, que nosotros lo hemos entendido y vosotros, no. Como decía Jouvet, a través de 'Elvira' lo que entendemos es que no entendemos nada de teatro. O dicho de otro modo, el teatro siempre será un misterio, al cual nos acercamos con mucha dificultad. Éste es un espectáculo lleno de vida y pasión, que está muy lejos de lo conceptual o el metateatro, que es algo que a mí no me interesa nada".

En su presentación a la prensa, el actor quiso incidir que ésta es una pieza "marcada por la dualidad, que habla de un hombre que existió y un personaje femenino ficticio, de un maestro y una alumna. Es un montaje sobre la verdad y la mentira, sobre el sentimiento y la técnica, sobre el abandono y el orgullo, sobre el virtuosismo y el dolor... Es un combate feroz, un cuerpo a cuerpo lleno de crueldad y dulzura, en definitiva, las preguntas que plantea van mucho más allá de los problemas para interpretar a Molière".
Las entradas para Elvira en el Teatro Kamikaze, al que Servillo elogió como un espacio "de resistencia y barricada" llevan meses agotadas. "Si la reina Letizia quisiera venir, tendría que darle mi propia entrada", comentaba el Consejero de Cultura, Jaime de los Santos. En el Piccolo Teatro de Milán 30.000 espectadores aplaudieron la obra durante tres meses. Y es que todo el mundo quiere ver a este coloso que, precisamente, recela de "esos teatros que utilizan la popularidad de los actores como reclamo de taquilla, eso no ayuda al teatro ni a los valores que quiere dar".
Servillo es muy crítico con el desprestigio en el que, a su juicio, ha caído la figura del cómico. "Algunos creen que un actor es alguien que toma un Martini tras otro mientras espera a rodar una película". A él le gusta recordar la definición de la interpretación que daba el maestro Jouvet: "El actor es alguien que llega a entregar un mensaje a pesar suyo". "Jouvet sostiene que el comediante es el transmisor del texto, alguien que se acerca al personaje con una modestia particular". Nada que ver con esos que usan los personajes para explicarse a ellos mismos o que se limitan a subirse a un escenario para exhibir su talento. 
"Hay muchísimos actores famosos muy malos", recalcó airado. Entonces, ¿qué es para Servillo un auténtico actor? 
«La conciencia del verdadero actor es sentirse hombre cada día, cotidianamente. Un gran actor no impondrá jamás su opinión de un personaje, nunca osará haceros creer que lo que estáis pensando es lo que él quiere que penséis ni sobre él ni sobre el personaje. Desconfiad de los que hacen eso. El teatro invita a reflexionar con la propia cabeza. Los actores deben multiplicar la problemática de los personajes, exaltar la contradicción, hacerlos más humanos, darles más dimensiones».
Sin duda, Louis Jouvet es un maestro para Servillo, quien ve su equivalente italiano en el añorado Vittorio Gassman, otra figura que supo combinar teatro y cine de forma singular.
 Otros maestros que le inspiran son el Nobel Eduardo Di Filippo o el veterano Carlo Cecchi, aunque Servillo asegura que él aprendió a actuar asomándose a las calles de Nápoles. "Nápoles es una oportunidad para ensalzar la gran comedia humana, es una especie de Comedie Française al aire libre. El napolitano posee de forma natural un sentido de la ironía sobre la existencia, que es una forma en la que la pasión toma distancia de las cosas y ése es el mecanismo de la actuación".

"Elvira"

Ésta no es la primera vez que Servillo actúa en el Festival de Otoño a Primavera. Hace tres años, en pleno boom por La gran Belleza, ya llenó los teatros del Canal con Le voci di dentro. Una comedia de Filippo con la que ya dejó claro su amor por la escena. En esta ocasión, con un texto tan teatral, el actor quiso volver a ahondar en el misterio supone subirse a las tablas frente a los espectadores. 
"El teatro es una aventura que consiste en buscar en uno mismo aquello que nos resulta extraño y, por tanto, es familiar a cada uno de nosotros. El teatro es perderse y volverse a encontrar, es el arte de la contradicción». Hace apenas unos meses que Servillo terminó de rodar Loro, su nueva colaboración con Paolo Sorrentino, en la que encarna a Silvio Berlusconi. Pese a las expectativas por el filme, Servillo tiró de un recurso muy de político para no hablar de este trabajo: 
"Hoy no estamos aquí por eso". Y se limitó a comentar lo feliz que le hacía volver a trabajar con Sorrentino, un hombre que "me ha cambiado la vida". 
¿Sería posible verles colaborando en un escenario?
 "No lo creo, a él no le interesa mucho el teatro, pero ¿quién sabe? Ha grabado dos de mis obras de Filippo". Hay un maestro con el que este hombre, que se relaja fuera del trabajo escuchando música clásica y paseando, ya no podrá volver a trabajar: Theo Angelopoulos.



Ambos comenzaron a colaborar en una película en los días más duros de la crisis económica griega. A la semana de rodaje, una moto atropelló al cineasta griego acabando con su vida. Servillo recuerda cómo el cineasta de La eternidad y un día le contaba que los teatros de Atenas estaban llenos mientras la gente apenas tenía dinero para pagar las facturas. La explicación que le daba era la siguiente:
"El teatro es una ocasión para estar unos cerca de otros y sentirse menos solos. En los momentos de crisis el teatro conforta y responde a nuestra soledad".Ese carácter asambleario del teatro es algo que los políticos parecen haber olvidado. Como explica el actor, "en la última campaña a las elecciones italianas no hubo mítines. Ni siquiera hubo un debate electoral entre los políticos, como si las ideas ya no hubiera que debatirlas. En cambio, sea cual sea el género que se use, el teatro siempre es una ocasión para confrontar las ideas".
Y ese debate puede ser la fórmula para escapar de ese narcisismo que Servillo achaca a los políticos. "Todos hablan de yo, yo, yo, y no de nosotros, nosotros, nosotros". Eso sí, de Berlusconi, ni una palabra. Esa comedia queda para la gran pantalla y él en su visita a Madrid quería reivindicarse como lo que es, uno de los grandes hombres del teatro europeo

La serie de televisión Breaking Bad.-a

Introducción  Breaking Bad es una serie de televisión dramática estadounidense creada y producida por Vince Gilligan. Breaking Bad...